HOMENAJE A LAS MADRES DE TRASONA

Hoy día de la madre queremos desde este blog hacer un homenaje a todas las madres que vivieron, viven y vivirán en nuestro pueblo.

Empezaremos a principios del siglo XX cuando las mujeres de nuestro pueblo eran madres de familia numerosa, todas daban a luz en casa con la ayuda de alguna vecina entendida.

En cada casa de Trasona había seis o siete niños como mínimo  corriendo por los praos ayudando a "llindar" el ganado, algunos de aquellos niños emigraron a Cuba en busca de una vida mejor.

Estas madres pasaron muchas necesidades y trabajaron duro, cuando llegó la guerra y sus maridos e hijos se vieron afectados supieron seguir con las caserías y con la ayuda de sus hijas trabajar las tierras para poder comer y no pasar hambre, que no se notase  la falta de los hombres.

Las madres de los años 40 y 50 hicieron felices a sus hijos con las pocas cosas que tenían en esa época.

Supieron adaptarse a los cambios bruscos de la industrialización de Trasona por Ensidesa, con las expropiaciones y sus efectos como  la perdida de sus caserías y sus costumbres.

Nuestras madres lucharon porque sus hijos estudiaran y tuviesen una carrera , estudiaban con ellos y al mismo tiempo ellas también aprendían muchas cosas que no sabían o que tenían olvidadas

Las madres de los años 50 supieron pasar de lavar en el río a lavar en lavadoras y de poner la comida al fresco en la ventana con cuidado para que no la picara las moscas a tener en sus casa nevera para guardar los alimentos, y salieron fuera de Trasona a conocer otros mundos de vacaciones en aquellos seiscientos o en el dos caballos o en la furgonetina  que tenían sus maridos.

En los años 50 y 60 a nuestro pueblo llegaron  madres coraje que cogiendo a sus hijos y una maleta,  siguieron a sus maridos en busca de un mundo mejor, dejando atrás padres, familia, amigos.y un mundo lleno de luz y sol para sumergirse en una Trasona llena de humos y lluvia.

Pronto se aclimataron y lucharon para poder entenderse con los que vivían en nuestro pueblo  y los que iban llegando, cada uno de una región de Espasña, pero nunca olvidaron sus orígenes  y siempre que podían volvían de vacaciones a su tierra para enseñarla a sus hijos y que supieran valorar lo que tenían.

En los años 70 y 80 las hijas de estas mujeres se convirtieron en madres, sus hijos ya no nacían en casa,  lo hacían en el Hospital San Agustín de Avilés y sus embarazos estaban controlados desde el principio por un medico.

 Aparte de cuidar a sus hijos muchas, también trabajaban en casa y  afuera,   tenían una profesión conseguida gracias al empeño de sus madres  que querían que nunca tuviesen que depender del marido para conseguir lo que quisieran.

Ellas trataron de enseñar a sus hijos la libertad y las fuerzas para superarse que ellas aprendieron.

En los 90 y  en el 2000  ya no eran unas pocas las madres trabajadoras fuera de casa , eran la mayoría, y los niños mientras ellas trabajaban se los dejaban a sus madres o abuelas o los llevaban a la guardería  a Avilés porque en Trasona no había ni hay guarderías.

Hoy muchas madres se quedan en casa cuidando de sus familias porque no hay trabajo para ellas y a veces ni para sus maridos y tienen que pedir ayuda a sus padres para que sus hijos no pasen necesidades, esperemos que esto pase pronto.

No queremos olvidarnos de esas abuelas que por circunstancias de la vida tuvieron que convertirse en madres de sus nietos y de las hijas que tuvieron que cuidar de sus padres como si fueran sus madres.

Un recuerdo especial a las madres que se han ido en este último año.
Nuestra enhorabuena a las madres que han tenido hijos este año. ¡ la vida sigue!